Todo empezó con una promesa.
Una promesa frente al espejo, en un momento de duda, de cansancio... y de hambre por cambio.
No fue fácil. Nunca lo es.
Pero paso a paso, repetición tras repetición, descubrí algo más que músculo y fuerza: descubrí disciplina, constancia y propósito.
Hoy soy entrenador personal
Pero antes de eso, fui como tú: alguien buscando su mejor versión.
Mi trabajo no es solo guiarte en el gimnasio. Es ayudarte a construir un estilo de vida donde cada victoria, por pequeña que parezca, te acerque a quien quieres ser.